Está visto que no soy moderno… lo que se entiende como moderno. Mi hija pequeña, una artista veinteañera, me ha dejado claro rotundamente que si no publico en Instagram es como si no existiera hoy en las redes.
Ya tengo un perfil en Instagram… pero lo tengo olvidado. No me ha resultado nada atractivo como escenario y, hasta ahora, apenas lo he utilizado. Como mi hija me ha propuesto encargarse de manejar por mí esa red, me he prestado a participar en ese nuevo marco.
La dinámica va a ser diferente de lo que hasta ahora he hecho: unos vídeos cortitos, de 1-2 minutos de duración, en relación a un tema concreto. En la medida en que vaya editándolos, los dejaré expuestos en mi blog «El Arte de Vivir».
Y para botón de muestra, a continuación os dejo el primer vídeo (1.- Presentación en Instagram).
Salud para ti y los tuyos.